Para oponerse a cualquier proyecto o política que atente contra el medio ambiente, su vida comunitaria, sus sistemas productivos, su tejido social, sus sistemas normativos y sus territorios, 30 comunidades indígenas zapotecas y campesinas de Tlacolula de Matamoros, Ocotlán de Morelos, Ejutla de Crespo, Zimatlán de Álvarez y Miahuatlán de Porfirio Díaz, constituyeron la Asamblea de los Valles Centrales contra la Minería.
De acuerdo con el pronunciamiento de las comunidades y 25 organizaciones, sus territorios fueron concesionados a diversas empresas mineras sin su consentimiento desde hace más de diez años y hasta ahora, 90 mil hectáreas de los Valles Centrales se encuentran en peligro, debido la explotación minera por las empresas Fortuna Silver Mines y Gold Resource Corp.
Esas empresas han impulsado a Oaxaca como el octavo estado de la república en explotación de oro y plata, sin embargo para las comunidades su operación se ha traducido en violencia, asesinatos, agresiones físicas, daños irreversibles al medio ambiente, así como han causado el rompimiento del tejido social, divisiones y enfrentamientos.
De acuerdo con el manifiesto, las 30 comunidades y las 25 organizaciones acordaron seguir defendiendo a la madre tierra, a cuidar y defender el agua y todos los bienes comunes presentes en sus territorios, porque son prohibidos para la minería.
Además, convinieron en firmar ni autorizar ningún tipo de permiso, convenio, contrato, documento o instrumento legal, que tenga por objeto extraer sus bienes comunes, tampoco autorizarán el cambio de uso de suelo para realizar actividades mineras en sus territorios.