La mina San José está operando actualmente bajo la protección de los tribunales mexicanos; lo que permite la operación continua de la mina San José más allá de la fecha de vencimiento. De acuerdo con la minera canadiense, Compañía Minera Cuzcatlán, filial de Fortuna Silver, interpondrá una apelación en los tribunales mexicanos. La minera está trabajando con sus asesores legales para presentar una apelación a la Orden de Denegación que argumenta que la Minera Cuzcatlán cumple plenamente con todas las leyes ambientales materiales y; por lo tanto, tiene derecho a una extensión del EIA según la ley aplicable.
El 10 de noviembre recibió una orden de denegación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales; con respecto a la solicitud de prórroga de la autorización de impacto ambiental en la Mina San José. El 23 de octubre expiró su principal autorización ambiental.
Es importante señalar que la compañía debe obtener una orden judicial permanente o protección equivalente; en forma y sustancia aceptables para los prestamistas que actúen de manera razonable, antes del 20 de noviembre de 2021.
Los prestamistas bajo la línea de crédito han acordado renunciar a ese requisito hasta el 18 de febrero de 2022; siempre que dicha orden judicial permanente o protección equivalente no se haya levantado o suspendido antes de la misma. Inversionistas dieron una prórroga de tres meses a la empresa FSM para conseguir nueva MIA, en caso contrario se retirarán.
La empresa canadiense Álamos Gold pretende impulsar en más de 15 mil hectáreas de Temixco, Xochitepec y Miacatlán en Morelos mineras a cielo abierto, lo que rechaza Unificación de Pueblos y Colonias Contra la Minería en Morelos.
Se define entonces minería a cielo abierto como aquella que busca la obtención de recursos naturales en la superficie del terreno y no de forma subterránea, aplicando sustancias químicas que remueven grandes cantidades de sedimento para la extracción de minerales, como oro, cobre o uranio. Las actividades mineras, de entre todas las actividades industriales, se caracterizan por tener un alto potencial destructivo de los ecosistemas y poblaciones humanas cercanas a los sitios donde estas empresas se instalan.En México, así como en todo el mundo existen pueblos organizados que se oponen a la megaminería y llevan adelante acciones para garantizar la vida y los derechos humanos frente a esta industria que extrae todo sin dejar nada.
Es por ello que la Unificación reafirma su rechazo al proyecto minero y señala que «su progreso es barbarie, ecocidio, es devastación», y recuerda que el proyecto que se pretende realizar en la región es una amenaza no sólo para el medio ambiente, sino también para el patrimonio histórico y cultural de Xochicalco.
La industria minera deja un basurero tóxico por todo el país. El primer inventario elaborado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) revela el rastro contaminante de 585 presas de jales. El recién publicado Inventario homologado preliminar de presas de jales en el país marca la ubicación de las 585 existentes; sin embargo, la digitalización de la base de datos sólo refiere 243 registros. A éstos, la Semarnat los identifica con el nombre de la mina, la compañía a la que pertenece, el estatus en el que se encuentra, el mineral que explota, así como los datos de la entidad y municipio donde se aloja. Para Julieta Lamberti, directora de Investigación en la organización Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación (PODER), el riesgo de que existan las presas de jales radica en la falta de control que ha habido en administraciones anteriores, pues no hay seguridad de que cumplan con la normatividad y los requisitos técnicos para ser seguras. La investigadora de PODER expone que el riesgo principal es que se rompan o que se rebalsen y se derramen en las localidades cercanas. Algunas están cerca de ríos y sus contaminantes pueden llegar a los afluentes, a la tierra, filtrarse en el agua subterránea. Otras, muy antiguas, ni siquiera tenían la obligación de tener geomembranas; entonces “eso está filtrando todo el tiempo hacia el subsuelo y lo que llega a las presas de jales de pronto los residuos de los procesos para obtener minerales”, informa Contralínea.